Vamos a realizar un experimento casero: solo tenemos que dibujar flores sobre un papel normal.Podemos colorear con lápices de colores o hacerlas con papel de color. Nuestra flor tiene que tener pétalos bien separados entre sí, como una margarita. Recortamos la flor, doblamos los pétalos hacia el centro, y las ponemos en un plato con poca agua (son suficientes 2 cucharadas) con mucho cuidado. Ahora tened paciencia y ... «Mágicamente» ¡veremos cómo nuestra flor florece!
¿Por qué sucede?
Al igual que las plantas, el papel está formado por tubos capilares. Del mismo modo que el agua presente en la tierra es absorbida por las raíces y sube hasta las hojas, el agua absorbida por la parte de la flor que está en contacto con el agua sube por los capilares, mojando el papel y dándole un peso mayor, que hace que los pétalos «florezcan»